Mi mascota llegó a mi vida en un momento difícil, y de los tres componentes de mi puzzle, él fue el primero en llegar a mí. Cuando llevaba 3 años conmigo, me vio conocer y enamorarme de mi marido, y cuando le quedaba poco para cumplir 6 años, llegó mi terremoto a nuestras vidas.
Mi hijo ha revolucionado nuestra existencia por completo, la primera, la de mi mascota. Él no estaba acostumbrado, ni de lejos a los niños, pero le recibió de maravilla desde el primer momento. No en vano, fue él quien me avisó de que algo estaba pasando en mi cuerpo, y fue gracias a él que me hice un test de embarazo y descubrí mi estado.